" 'Aguante la droga!' se le escucho vociferar al joven mientrás abrazaba a su compañero. Con el puño en alto, la sonrisa radiante y los ojos cristalizados, el jóven se acercó a su compinche, lo abrazó, le convidó de su trago y con una mirada cómplice y perdida a la vez le dijo 'Esto es vida, viva la vida, viva el amor, que viva la pepa'. El otro joven atónito por la situación no hizo mas que abrazarlo, devolverle el trago y meterse otro cartón en el ojo."*
*Párrafo extraido del libro de cuentos de Agustín Calleri "Mi vida en el tenis"
